El norteamericano marcó un antes y un después en el tenis moderno con sus saques potentes, a tal punto de hacer una gran carrera en base a él y sus velocidades extremas.

Desde Más Tenis nos preocupamos no solo por resultados del Tour, sino también por ver y analizar el tenis desde otra óptica y en este lunes decidimos analizar el saque de uno de los mejores servidores de la historia del deporte, el norteamericano Andy Roddick, quien en base a ese golpe forjó una carrera extraordinaria, llegó al número uno del mundo y a ser campeón del US Open del año 2003 con apenas 21 años.

Roddick tenía un estilo particular de servicio, lejos del armado convencional que se recomienda para los empuñan la raqueta. La leyenda cuenta que un día un entrenador le descubrió el potencial en ese golpe por una improvisación que hizo el joven estadounidense al cometer uno tras otro errores increíbles con el mismo. El entrenador le indicó que repita una y otra vez ese movimiento hasta que lo mecanizó y así logró pulirlo, consiguiendo así uno de los servicios más potentes y exactos de la historia.

Una vez que irrumpió en el Tour, sorprendió rápidamente por ese golpe y con grandes actuaciones en sus primeros años en el profesionalismo, rápidamente se coló entre los primeros diez tenistas del mundo, hasta llegar el Abierto de los Estados Unidos del 2003, el cuál conquistó y el que le resultó el impulso final para ir hacia la cima del ranking, la cuál la alcanzó a final de la temporada.

Su servicio era comentado por todo el mundo y tal es así que llegó a romper el récord del saque más veloz un par de veces, aunque hoy ya no cuenta con ese récord. Lo cierto es que el promedio de velocidad que tenía en su servicio por aquellos años era único y la cantidad de aces le administraba la energía en encuentros largos, lo que le permitía desenvolverse de una mejor manera cuando los partidos se estiraban en cuanto a su duración.

Alguna vez, David Nalbandian, uno de los mejores devolvedores de la historia del tenis, indicó: “Roddick no te da casi chances en su servicio, así que cualquier game de 30-30 es posibilidad para tener un break point. Hay que estar fuerte de cabeza para saber que los games con su saque mayormente están perdidos y aprovechar al máximo las únicas chances que te da por encuentro”. Cabe destacar que el cordobés supo ganarle al norteamericano en superficies duras en un par de ocasiones.

Hoy por hoy, Roddick está lejos del profesionalismo desde el año 2012, cuando se retiró en el Abierto de los Estados Unidos y varios tenistas lo han superado en cuanto a la velocidad y en cuanto a la forma de juego, pero para el momento en el que irrumpió, él marcó, con su saque, un antes y un después en el Tour y de eso hay que estar seguros, porque Roddick, sin dudas, fue pionero en lo que refiere a servicios rápidos y a partir de él varios tenistas, tales como Milos Raonic y John Isner, por citar los ejemplos más claros y similares, imitaron su forma de jugar para hacer de ello una gran carrera deportiva dentro del tenis.