El Peque está realizando una preparación exhaustiva en las instalaciones del Racket Club de cara a lo que sera la gira latinoamericana de certámenes en el 2019 y que comenzará la próxima semana con el Córdoba Open.

Diego Schwartzman se consolida cada día más dentro del circuito ATP. Y uno de los lugares donde tiene la posibilidad de sumar varios puntos para lo que será su temporada es, sin dudas, Latinoamerica. Es por ello que el Peque está, por estos días, realizando trabajos intensivos en el Racket Club de Palermo para preparar de la mejor forma las competencias de Córdoba, Buenos Aires y Río de Janeiro, y finalizar, pero ya en cemento, en el Abierto de Acapulco.

Los trabajos comandados por Juan Ignacio Chela y Martiniano Orazi, sus respectivos coach y preparador físico consisten en ganar una buena movilidad y estar fuerte para los peloteos intensivos, con el fin de poder aguantar partidos largos y con mucha movilidad y resistencia física. En definitiva, trabajos bien adaptados para el juego tradicional de polvo de ladrillo.

Además de Chela y Orazi, durante estos días, además, se lo vio al Peque peloteando con Gastón Gaudio. Schwarztamn y el ex campeón de Roland Garros realizaron diversos ejercicios de direcciones, tanto de derecha como de revés, en actividades típicas que demanda la superficie en la cual se disputarán los torneos de Latinoamerica.

Schwarztman defenderá en estas semanas el título de Río de Janeiro, además de la segunda vuelta en Acapulco, lo que contabiliza un total de 545 unidades. Cabe destacar que Buenos Aires y Córdoba, al ser torneos de menor calibre en la escala ATP, son los que menos cuentan para la suma total del ranking de los profesionales, así que para que Diego pueda sumar puntos en estos dos torneos deberá, al menos alcanzar la final de los mismos y superar la barrera de semifinales cosechadas en los dos mejores certámenes de esta calaña durante las últimas cincuenta y dos semanas, ya que, de caso contrario, mantendrá las unidades cosechadas hasta hoy.

Las mejores imágenes del título del Peque en Río 2018: