El Grand Slam estadounidense decidió que en en court solo se encuentre el juez de silla, y utilizará la tecnología para las decisiones en los flejes.

El COVID-19 cambió el paradigma mundial en varios aspectos y todos deberán acostumbrarse a una nueva realidad que se aplicará hasta alcanzar la normalidad a la que estaba inmerso el mundo. Hasta llegar allí, en el medio de ese contexto, se jugará el Abierto de los Estados Unidos en un par de semanas, y una de las medidas que tomó con respecto a este asunto y que más sorprende es la falta de jueces de línea en los estadios, en donde la tecnología los reemplazará definitivamente.

El US Open fue uno de los impulsores para que el tenis profesional vuelva a su actividad, y si bien las medidas homologadas por la organización no cayeron del todo bien en la gran mayoría de los jugadores, hay una que, sin dudas, es apropiada, al menos, en este contexto, y es que los jueces de línea no estarán presentes en los partidos y todo se medirá con la tecnología que se viene utilizando desde hace algunos años, dando así el aval para que los jugadores se sientan menos expuestos al contacto con gente ajena a la actividad deportiva meramente aplicada.

Así, en los courts, solamente estarán los jueces de silla y tres alcanza pelotas por partido, lo que hará que los que disputen el encuentro estén prácticamente solos en el estadio, donde tampoco habrá concurrencia del público, y as´pi se disminuirá el riesgo de contagio del virus. La tecnología, sin dudas, hará un aporte fundamental para que esto tenga el curso deseado.