Federer remontó una desventaja de un set en contra ante el japonés Nishikori y se aseguró el pase a las semifinales del tercer Grand Slam de la temporada.

En el momento en el que el cuadro los cruzaba, se preveía que el duelo entre Roger Federer y Kei Nishikori iba a ser de otra galaxia. Y así lo fue. El suizo y el japonés jugaron en un gran nivel durante todo el transcurso del match entre ambos en los cuartos de final de Wimbledon y la victoria quedó para el lado del helvético, quien remontó un set en contra ante el asiático, dio vuelta el mando del enfrentamiento y se quedó con el pasaporte directo a las semifinales.

Federer, campeón en Wimbledon en ocho oportunidades, comenzó errático con su servicio y sus movimientos durante su primer juego de saque, algo que Nishikori aprovechó a la perfección para adueñarse de ese lejano primer juego, conseguir el quiebre necesario, mantener su servicio hasta finalizar el set y culminar con esa primeras manga con un 6-4 a su favor.

Roger reaccionó rápidamente y pronto igualó las acciones con un contundente 6-1 en el segundo parcial y, a partir de allí, todo cambió en el encuentro, en donde se emparejaron las acciones de ambos lados de la red y una batalla de tenis de alto vuelo se libró entre ambos tenistas.

Con dos buenos parciales, finalizados ambos en 6-4, Federer selló su pase a las semifinales del tercer Grand Slam de la temporada y así mejoró su actuación en la última temporada en el All England, cuando había caído ante el sudafricano Kevin Anderson en esa instancia.

Ahora el suizo buscará un lugar en la definición ante el español Rafael Nadal, tercero en la preclasificación y su archirrival desde hace una década y media en el Tour de la ATP, quien llegó al duelo ante Roger tras vencer en sets corridos al estadounidense Sam Queerrey.