Bajar un talle de pantalón


Tips de nutrición, un programa de ejercicios rendidor, el plan integral para lograrlo


El cambio cuesta, lleva tiempo, pero se puede lograr. En esta altura del año, con la cercana llegada del verano, muchas desean bajar un talle de pantalón. Por suerte, este objetivo es posible si se lleva a cabo ciertos hábitos diarios que no solo son beneficiosos para la salud, si no que harán que bajar de peso sea más fácil.

La alimentación

-Beber no menos de 2,5 litros diarios de líquidos que no aporten calorías y evitar el exceso de las gaseosas, ya que por más que el gas otorga sensación de plenitud, distiende y eso posiblemente incomode. El estar bien hidratado ayuda al transito intestinal, y ayudará a que uno se sienta más liviano durante el día. De todos modos, no hay que dejar de lado los gustos que uno se quiere dar, especialmente los fines de semana, pero la clave esta en la moderación.

Incluir una abundante proporción de verduras, tanto crudas como cocidas, en el almuerzo y la cena, ya que estas otorgan saciedad y hacen que sea más fácil reducir las porciones, que pueden llegar a tener de más. A su vez, hay que incorporar una porción de carne magra -roja o blanca- al día, que debe tener el tamaño de la palma de la mano. Una buena opción es incorporar huevo en las comidas, en especial las claras porque contienen el doble de proteínas que la yema.

Nunca dejes de lado los cereales y derivados, como el pan, los copos o los fideos, porque son una fuente de energía. Si hay que recomendar, los integrales suelen ser los mejores, al tener más fibras y dar más poder de saciedad. En las comidas además se deben incluir al menos tres porciones diarias de lácteos descremados, como puede ser una taza de leche, un pote de yogur y una porción mediana de queso tipo Port salut.
Actividad física

Planifica al menos tres horas semanales de clases guiadas, ya que esto ayudará a hacer bien los ejercicios, con la técnica correcta. En el caso de que los últimos meses haya habido un ritmo sedentario, es mejor arrancar de a poco y con ejercicios como una clase de aero localizada. El resto de los días se pueden programar caminatas de de 30 minutos a un ritmo moderado y constante, que a medida que el cuerpo se vaya acostumbrando se puede aumentar la intensidad.

Evitar las fajas o plásticos, ya que son sumamente perjudiciales para la salud al fomentar la deshidratación y no la pérdida de grasa. El cuerpo necesita estar hidratado para el buen funcionamiento y rendimiento muscular. Lo más importante es utilizar ropa cómoda y fresca para un buen rendimiento físico.

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