El guardavalla de Cerro Porteño no anduvo con vueltas tras el triunfo de su equipo por 2-0 ante Guarieña y dejó en claro que todo lo que se le vendrá en el Clausura se jugará con el cuchillo entre los dientes.
“Ahora todo es una final, todo encaramos como una final. El domingo tenemos el clásico (vs Olimpia), que también es una final”, aseguró el brasileño que tiene la valla menos vencida del certamen (5 goles en contra en 13 partidos).
No conforme con sus dichos, el uno Azulgrana comenzó a calentar la previa y jugó para la hinchada. “El clásico no se juega. Se gana. Y con nuestros hinchas y en nuestra casa, tenemos que ganar sí o sí”, sentenció.
Cerro está segundo en el campeonato, a tres de Guaraní, mientras que su acérrimo rival, el Expreso Decano, marcha último en la tabla de posiciones con un rumbo incierto.
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