Lo más difícil en un equipo plagado de jugadores de renombres es poder administrar bien los egos y que todos estén satisfechos con sus minutos jugados. Pero a pesar de eso, también el como se llevan dentro de la cancha entre ellos debe ser importante. En el PSG pareciera que eso se va agrietando de a poco.
Primero con el fastidio de Messi por ser reemplazado en el duelo ante el Lyon, donde con una mueca hacia Pochettino dijo todo. Luego se conoció una lesión en una de sus rodillas, que lo marginó de los dos últimos partidos. Justamente el último fin de semana, volvió a vivirse una situación de enojo dentro del plantel, ahora entre dos jugadores estrellas.
Mbappé fue reemplazado a falta de dos minutos para que termine el partido, y se fue enojado a sentarse al banco de suplentes. ¿Por haber sido reemplazado?. No, sino por que según él, Neymar no se la pasaba adrede. “Él no me la pasa”, se llega a leer que dice el delantero francés a Gueye. ¿Conflicto en puerta?.
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