Paolo lo hizo
Guerrero parece ser la gran obsesión de Boca, que quiere incorporarlo para 2020. El delantero peruano ya logró algo que Riquelme no pudo conseguir.
Boca ya comenzó a apuntar los cañones al 2020 y al gran objetivo de siempre: ganar la Copa Libertadores. Para eso, con el mercado de pases casi a la vuelta de la esquina, varios apellidos comenzaron a sonar pero sobre todo uno con más fuerza que cualquiera: Paolo Guerrero. El delantero está en el Inter de Porto Alegre y ya logró lo que ni siquiera Riquelme pudo conseguir: el consenso en todas las fuerzas.
¿Por qué? El delantero peruano pica en punta para jugar en el Xeneize, ya que tanto la fórmula Gribaudo – Crespi, Ameal – Pergolini y Beraldi – Ferrari pretenden que el nueve se sume al equipo encabezado (por ahora) por Gustavo Alfaro ni bien arranque la pretemporada el próximo mes de enero.
Guerrero tiene 36 años y si bien está casi en el epílogo de su carrera profesional, todos apuestan por su experiencia y olfato goleador para pelear el puesto con Ábila, para asi intentar obtener la séptima Copa Libertadores.
