Osella dejó su renuncia a disposición.
La derrota ante Boca, en la noche de ayer, se suma a una de las tantas que sufrió Colón en este último tiempo. El Sabalero se encuentra comprometido con el promedio y, Osella, avisó que si Vignatti lo desea, él se va.
“Desde que llegué jugamos seis partidos, de los que perdimos cuatro y empatamos dos. Yo no me ato a la silla. No hay que aferrarse a un lugar”.
“Cuando los resultados no se dan, el que se tiene que ir es el entrenador”.
“Si veo que ellos están convencidos de que podemos dar vuelta esta difícil situación, por supuesto que la fuerza de este lado va a estar siempre”.
“Tengo la obligación de escuchar cuál es el pensamiento de los dirigentes. Tonto no soy. Tengo claro que el técnico se tiene que ir cuando los resultados no aparecen. Si hay algo que no quiero es hacerle daño a Colón. Y si ellos consideran que le estoy haciendo daño al club, me iré”,
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