El Superclásico ya era historia, el cero a cero ya estaba consumado. River había sido superior y Gallardo lo tenía claro. Y bajo ese concepto enfrentó el micrófono en la conferencia de Prensa. Y lo promero que hizo fue asumir la responsabilidad, cómo conductor de Grupo, de poder romper los cerrojos propuestos:  “Es función mía como entrenador y de los jugadores en lo colectivo, sobreponernos a todo tipo de planteo. Si nos juegan de igual a igual, les pasa lo que les pasó a Lanús y Racing, que son dos grandes equipos. Los rivales observan y toman nota, y ante eso vienen a jugar con nosotros como vinieron hoy. Y eso se gana con respecto”.

Más allá de no esquivar las responsabilidades, también hizo mención Napoleón a las cuestiones externas que tocaron vivir en el viaje a Paraguay: “Siempre intentamos porque es nuestra búsqueda. No puedo dejar de valorar eso. A mí tampoco me sirve hablar de los planteos rivales porque debemos tener las herramientas para sobrellevarlos y sorprender a esos buenos planteos defensivos. Nos faltó un golcito. Sí hacíamos un gol, la cosa hubiera sido distinta. Nos faltó frescura para los últimos metros, donde se deciden los partidos. Nos faltó fuego y un día más de descanso después de un vieja exigente y con algunas cositas externas a Paraguay. Y a la Copa vamos a llegar mejor en ese sentido”.

Y con respecto a los lesiones que afectan a Boca, el entrenador de Boca fue contundente: “A mí me gusta que los rivales puedan estar con todas sus fortalezas para después medir fuerzas. Boca es el plantel más rico del fútbol argentino y si le faltan jugadores tienen qué poner, como nosotros. El tema es la idea: si a nosotros nos faltan futbolistas, está la forma y las idea más allá de quiénes jueguen”.

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