Si bien todavía no se fue, ni se sabe lo que pasará con su futuro, en Boca ya manejan posibilidades para no quedar desprevenidos ante una eventual renuncia de Alfaro. Burdisso no quiere que le pase lo mismo que con Schelotto, en diciembre pasado.
Gabriel Heinze arrasa en todas las encuestas. El joven entrenador armó una maquinita en Vélez y los hinchas creen que es la mejor opción. Sin embargo, es muy difícil que se vaya de Liniers.
Ricardo Gareca, entrenador de la Selección peruana, es un técnico con espalda suficiente como para bancarse un duro momento como el que atraviesa Boca. El Tigre renovó con Perú pero escucharía la oferta.
Jorge Almirón es un viejo anhelo de todas las listas. Luego de romperla en Lanús, sonó en varias ocasiones para sentarse en el banco Xeneize, pero su fracaso reciente en Cali y Boedo le bajan un poco la consideración.
Martín Palermo era número puesto para suceder a GBS. Sin embargo, el Titán consideró que no era el momento y tampoco recibió demasiado interés por los dirigentes. En diciembre, con comisión nueva, puede ser otra la historia.
Diego Armando Maradona, por último. El Diego sueña con ser entrenador de Boca y su acercamiento a la Superliga podría abrirle las puertas de otra manera.
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