El Xeneize debutó en la Copa de la Liga Profesional en un Alberto J. Armando lejos de su mejor versión. El césped estaba en mal estado y lleno de arena a raíz de las obras que iniciaron para mejorar el drenaje.
Sin embargo, la dirigencia azul y oro no quiso perder la localía y decidió jugar como sea en casa. Pero tras lo visto frente al Sabalero, Ameal, Riquelme y compañía evalúan cambiar de parecer.
En Brandsen 805 ya pusieron manos a la obra y piensan jugar en otra cancha los próximos dos encuentros ante Rosario Central y Huracán. Hasta el momento, son tres los estadios que tienen en mente.
Uno de ellos es el José Amalfitani (Vélez). También está en carpeta el Cilindro de Avellaneda (Racing) y el Palacio Tomás Adolfo Ducó (Huracán). ¿A dónde irá Boca?
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