José Mourinho le confirmó este domingo a la afición de la Roma que seguirá siendo su entrenador la próxima temporada a través de gestos desde el verde césped del Estadio Olímpico donde la Roma venció al Spezia por 2-1, con un tanto de Paulo Dybala en los últimos minutos en el cierre de la última jornada de la Serie A.
Tras el triunfo de La Loba, que colocó al conjunto dirigido por Mourinho en puestos de UEFA Europa League de manera definitiva y le arrebató la ilusión a la Juventus de poder clasificar a la segunda copa internacional más deseada del viejo continente -jugará Conference League-, el portugués salió a la cancha, debido a que no estuvo desde el banco a causa de una sanción que tuvo que cumplir y dio una vuelta al estadio para agradecer a la hinchada por el apoyo durante la temporada.
Al final de la vuelta, cerca de la tribuna lateral y del banco de suplentes visitante, el técnico de 60 años de edad, desató la locura entre los hinchas al hacer gestos de que seguirá la próxima temporada, señalándose primero a él mismo y luego al suelo con su mano derecha mientras asentía con la cabeza.
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