Martín Demichelis venía siendo visto de reojo por propios y ajenos y ayer logró un bálsamo después de haberse quedado con una finalísima ante Estudiantes de La Plata en Córdoba con un 2-1 que fue pura fiesta gracias a un golazo de Aliendro.
El propio DT sabe bien que está en el debe y tras la vuelta olímpica sentenció: “Ojalá sea el despegue”. Ahora sólo restará esperar y ver si la curva será hacia arriba o si tendrá nuevamente un pico descendente.
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