Hoy en día, Nicolas De La Cruz, es una de las piezas inamovibles del conjunto de Nuñez. Figura en el último partido de River y cada vez que se juega un partido trascendental, el uruguayo aparece en la nomina y se destaca en el campo de juego.
Pero no siempre fue así, hace un par de temporadas el mediocampista era muy resistido por la gente ya que no tenía buenas actuaciones cada vez que le tocaba jugar. El propio futbolista confesó que no le fue fácil adaptarse al juego en Argentina y al día a día en River.
“No fue nada sencillo. Tuve varias lesiones y el ritmo del fútbol argentino es muy diferente al que yo tenía en Uruguay. Me costó acoplarme a un equipo con una intensidad muy alta en todos los partidos como es River.Fue un déficit que tuve que mejorar con el tiempo… Tuve que superar muchos obstáculos que eran propios de un jugador joven que llega a un fútbol diferente y también tuve que mejorar en lo extrafutbolístico. La gente siempre espera un buen rendimiento de un jugador que llega del exterior y yo encima venía con la presión de ser “el hermano de”, que hace que te miren de otra manera. Era normal en su momento el malestar de los hinchas, lo entendía. Y hoy por hoy puedo decir que me gané mi nombre a base de esfuerzo, pero no fue nada fácil” declaró De La Cruz en los últimos días.
Además contó cómo logró superar la presión que sentía dentro de la cancha “Me superaba la presión. Sentía una mochila muy importante en la espalda cada vez que entraba. Y el clic se empezó a dar a medida que fui entendiendo lo que es el mundo River y el lugar en el que estaba. No podía quedarme solo con llegar, sino que quería mantenerme durante mucho tiempo en un club tan grande. Y tuve un partido clave en Brasil contra Inter que hice un gol de tiro libre. Ese día sentí un alivio y sabía que era el momento“.
Más allá del punto de inflexión que significó ese partido en Porto Alegre, en el cual River empató 2 a 2. El uruguayo reconoció que hubo personas importantes que ayudaron a solucionar el problema y, entre ellas, hubo alguien que fue vital: Sandra Rossi, especialista en medicina del deporte y neurociencias que trabaja pegada al plantel de Gallardo.
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