Dinamarca tuvo una jornada soñada en Azerbaiyán y le ganó a su par checo por 2-1 con tantos de Delaney y Dolberg, mientras que el descuento lo hizo Schick en el inicio del complemento.
El combinado escandinavo está entre los cuatro mejores del torneo más importante a nivel selecciones del Viejo Continente luego de 35 años. En aquella ocasión salió campeón (Suecia 1992).
Ya cómodo en semis, los daneses están a la expectativa de quién será su próximo rival el miércoles venidero en Wembley. El contrincante saldrá del ganador del cruce entre Inglaterra y Ucrania.
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