Mattis De Ligt es un marcador central holandés, de solo 19 años, y desde hace media temporada, una de las figuritas difíciles del mercado futbolístico en Europa. Juega actualmente en Ajax, es su capitán y referente, titular en la selección de su país, y ha jugado una Champions de la ostia. Es polifuncional, ha hecho goles importantes y su ficha se ha disparado hasta las nubes a pesar de quedar fuera a último minuto en semis de Europa.
Su nombre apareció por primera vez en las tapas de los principales medios deportivos de Europa a la par de Frenkie de Jong, con quien encarnaba la ” dupla del futuro” con anclaje en Barcelona. Si bien el mediocentro ya está en Catalunya, De Ligt ha demorado su decisión, un poco por que no termina de convencerle no ser confirmado como titular en el equipo, y otro poco por la aparición de nuevas novias de primerísimo nivel que pujan por sus servicios.
Su estilo de juego, su proyección y, obviamente, sus condiciones, lo imponen como un jugador apto para encajar en la defensa de Barca, aunque esto implicaría mover a Lenglet, que ha respondido de sobra. Lo económico está cerrado, aunque la siempre complicada relación de su agente, Mino Raiola, con Can Barca amenaza con voltear la operación. Con la finalización de las competencias de equipos en Europa, el mercado va tomando forma y no es de extrañar que en cada desayuno aparezca un nuevo pretendiente. A las ya sabidas apariciones de Juventus. Manchester Utd, Chelsea y PSG, se suman dos que parecieran ser las de más peso: Manchester City y Liverpool.
Los citizen, subidos a la impronta que Pep aporta desde su estilo y su cultura de juego, y los de Klopp, por él, por el relanzamiento mundial del equipo y por la posibilidad de jugar con Virgil Van Dijk, dupla titular en la “Oranje”, largan en la pole position en la carrera por el central.
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