Darío Ebertz habló luego de los hechos de violencia que hizo que el partido se suspendiera en varias ocasiones: “Siempre digo que es un partido de futbol, no vamos a la guerra. Pero ayer parecía que íbamos a la guerra”.
Además relató el escalofriante momento que vivieron al llegar al estadio y explicó como fue el operativo policial: “Me rompieron las ventanillas laterales. Me impactó en la costilla una botella de cerveza. Me quedó unos segundos sin aire. Antes habian vallas altas de madera desde Quinteros hasta la cancha. Ayer no estaban las mismas vallas que usaban en los partidos anteriores”.
Por último concluyó: “Todos me dicen ‘te regalaron, Gringo’. Y sí, para mí, liberaron la zona”.
Disfruta de acceso ilimitado entre más de 100 juegos de deporte, estrategia, acción y más.
Suscribirme