El Peque y los santafesinos consiguieron el pase a la segunda vuelta de Roland Garros y sellaron el martes redondo para el tenis argentino en París.

Un día volvió a pasar. Y como era costumbre en épocas de la Legión, el polvo de ladrillo francés se volvió a teñir de celeste y blanco por un día. Es que este martes, Diego Schwartzman, Federico Coria y Facundo Bagnis consiguieron el pasaje a la segunda ronda de Roland Garros, completando así un martes perfecto para los tenistas latinos del país más austral del mundo.

Schwartzman, décimo favorito y semifinalista de la temporada 2020, fue el máximo exponente de la Argentina en París durante este martes. El Peque se impuso al asiático Yen-Hsun Lu por 6-2, 6-2 y 6-3 y así selló su pase a la segunda ronda, donde se medirá ante el esloveno Aljaz Bedene.

Coria siguió los pasos del Top 10 argentino. El de Venado Tuerto tuvo una tarde brillante en el Bois de Boulogne y venció a una gloria del tenis moderno, el español Feliciano López, quien está transitando el que, seguramente, será su año de despedida. La victoria quedó para el hermano menor de los Coria por 6-3, 7-6 (4) y 6-2 y ahora buscará ser parte de la tercera vuelta cuando se mida al noveno preclasificado, el italiano Matteo Berrettini.

Bagnis, por su parte, también aportó lo suyo. El finalista del evento de Santiago, en Chile, allá por el mes de marzo, tuvo una gran labor ante el local Benjamin Bonzi, invitado especial de la organización. La victoria quedó en manos del santafesino por 7-5, 6-3 y 6-4 y el pase a la segunda ronda quedó asegurado. Allí, se medirá a Jan-Lennard Struff, el alemán que dio la sorpresa del día, al vencer en cinco parciales al ruso Andrey Rublev, séptimo favorito y finalista del Masters 1000 de Montecarlo hace algunas semanas.

El tridente fue perfecto en la tarde primaveral parisina. El Rolanga argentino fue el del 2004, pero éste dio un buen comienzo para intentar imitar a aquella hazaña de los Tres Mosqueteros celestes y blancos.