El mallorquín derrotó a Carreño Busta en sets corridos y se metió en la definición del Conde de Godó. Se medirá ante el griego Tsitsipas por la corona catalana.

Rafael Nadal juega sobre el polvo de ladrillo como si estuviese en el patio de su casa. Y quien lo sufrió en carne propia en el sábado de semifinales del Conde de Godó fue su compatriota Pablo Carreño Busta. El de Manacor derrotó al campeón de Marbella por 6-3 y 6-2 y así se clasificó a una nueva definición en el ATP 500 de Barcelona, evento que conquistó en once ocasiones.

Con un juego sólido desde el fondo de la cancha, Nadal, tres del planeta y primero en la preclasificación del Conde de Godó, se impuso a Carreño Busta en sets corridos. El mallorquín venía de dar un gran paso en los cuartos de final ante el británico Cameron Norrie y ante Carreño Busta, vencedor de Diego Schwartzman en los cuartos del viernes, consolidó su andar y se instaló en la definición.

Este domingo, del otro lado de la red, tendrá al griego Stefanos Tsitsipas. El Rayo viene de ser campeón en el Masters 1000 de Montecarlo, hace solo una semana, y su racha de partidos sobre polvo de ladrillo llegó a nueve victorias consecutivas este sábado, tras derrotar a Jannik Sinner, por un doble 6-3.

El duelo entre Nadal y el Rayo griego será el noveno entre ambos en el Tour, con una ventaja de 6-2 para el ex número uno del mundo, hasta el momento. El último antecedente entre ambos data de los cuartos de final del Abierto de Australia, durante este 2021, cuando Tsitsipas derrotó al de Manacor en cinco sets, remontando una historia que parecía imposible tras haber cedido los dos primeros parciales.