El Rayo se impuso al británico en sets corridos y volvió a una definición de Masters 1000, tras casi dos años.

Como un Rayo, directo a la final. Analogía perfecta para graficar la situación de Stefanos Tsitsipas en el Masters 1000 de Montecarlo, donde este sábado se impuso al británico Daniel Evans por 6-2 y 6-1 y, así, se instaló en la final de un evento de esta categoría tras casi dos años.

Tsitsipas, cuarto favorito, demoró una hora y nueve minutos para doblegar al inglés, quien venía de dar vuelta un duro duelo ante David Goffin en los cuartos de final. Con un juego sólido desde el fondo de la cancha, el Rayo mandó en el duelo desde principio a fin y dejó sin chances a Evans, quien poco pudo hacer ante las embestidas de su rival y terminó sucumbiendo ante el mismo en sets corridos.

De esta forma, el griego, cinco del planeta se metió en una nueva final de Masters 1000 en su carrera, la tercera. Además, volvió a conseguirlo tras casi dos años de sequía, ya que no lo alcanzaba desde Madrid 2019, cuando había vencido en las semifinales a Rafael Nadal, para luego caer en la definición ante el serbio Novak Djokovic.

Por otra parte, será la segunda final del griego en la temporada, tras la conseguida en Acapulco hace algunas semanas, donde cayó ante el alemán Alexander Zverev en sets corridos.