El ruso se quedó con el certamen alemán tras derrotar al griego Tsitsipas en la final en tres parciales. Fue su tercer título en lo que va de la temporada.

Andrey Rublev coronó su tercera final de la temporada tras derrotar en tres parciales al griego Stefanos Tsitsipas, en Hamburgo, en la previa de Roland Garros, por 6-4, 3-6 y 7-5, en más de dos horas de juego, y así consiguió su primer certamen en polvo de ladrillo desde Umag 2017, su trofeo debut en el mundo de la ATP.

El ruso, catorce del planeta, tuvo una semana soñada, y la victoria cómoda en las semifinales ante el noruego Casper Ruud, uno de los mejores jugadores sobre superficies lentas en lo que va del año, es una muestra clara de ello. A la final llegó totalmente confiado y, aunque el encuentro ante el griego demandó varios puntos difíciles y de una presión extrema, el joven de 22 años de Rusia los resolvió de manera magnífica para cerrar el match a su favor y así coronarse por tercera vez en lo que va del 2020.

Así, Rublev alcanzó su quinto título en su carrera, tras los dos conseguidos este año en Doha y en Adelaida, y el de Moscú la pasada temporada. Además, se hizo con su primer evento sobre polvo de ladrillo desde su título debut, en Umag, en el 2017.