El austriaco tuvo una semana increíble en Londres que por muy poco no pudo coronar con el título de Maestro. Sus victorias ante Federer y Djokovic son el punto clave de su progreso.

Dominio Thiem es uno de los mejores jugadores de la actualidad en el Tour de la ATP y está semana que pasó en Londres coronó gran parte de ello en la vida del austriaco. Es que el jugador que estuvo como el quinto cabeza de serie en la capital inglesa dio grandes muestras de que una renovación muy grande llegó a su tenis para cambiar para siempre.
Desde hace unos meses, el austriaco viene demostrando que está jugando un nivel increíble. Sus títulos en Beijing y en Viena eran parte de esta nueva etapa en su vida con el deporte blanco y en Londres coronó aquello que se venía gestando, ya que las victorias ante Roger Federer y Novak Djokovic en la zona de grupos no fueron una casualidad de estar bien ese día, sino un progreso y proceso mental que fue hilvanando poco a poco.
Es cierto, Stefanos Tsitsipas se quedó con el título y Thiem no pudo coronar semejante semana con el hecho de levantar el trofeo. Un par de puntos lo separaron de la gloria, pero lo que es real es que el austriaco terminó renovado la mejor temporada de su carrera, con cinco títulos bajo el brazo y siendo protagonista siempre, hasta el último dia de competencia en el Tour.