Jo-Wilfred Tsonga inició el año en Oceanía con el fin de volver a ser el que fue en el pasado y el camino no le resultó fácil. Tras aquel arranque demoledor en algunos eventos de principio de temporada, el francés, ex Top 10, mermó en su rendimiento y parecía que sus mejores días habían culminado tras la lesión que sufrió en los años pasados. Sin embargo, en Cassis, la semana pasada, en el Challenger de la ciudad francesa, se coronó campeón tras vencer en la definición al israelí Dudi Sela por 6-1 y 6-0.
Tsonga, quien este año se adueñó del ATP 250 de Montpellier en febrero, tuvo una gran semana en su propio país y la coronó con el certamen conquistado, venciendo a un gran rival como lo es el israelí Sela con amplia comodidad en la definición, para así hacerse con el segundo título del año a nivel personal y, además, escalar cuatro posiciones en el ranking mundial, apareciendo desde hoy lunes en el puesto sesenta y uno.
De esta forma, el francés se consagró por novena vez en un evento de esta categoría y se aseguró volver, poco a poco, a los primeros planos del tenis mundial, intentando también tener una nueva incursión en los puestos de elite dentro del deporte blanco.
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