Schwartzman venció a Ebden en cuatro parciales y se metió en la segunda ronda de Wimbledon. El argentino consiguió su cuarta victoria oficial sobre césped en su carrera.

A veces parece que las exhibiciones y la preparación de un tenista para adaptarse a determinado suelo trae sus frutos y así parece que sucedió con Diego Schwartzman y Wimbledon. El Peque debutó en La Catedral del tenis y venció por 6-4, 3-6, 6-3 y 6-2 al australiano Matthew Ebden y se coló en la segunda ronda del certamen británico consiguiendo así su cuarta victoria oficial en una superficie que hasta la temporada pasada le fue siempre esquiva.

Mostrando autoridad en los momentos claves y jugando un gran tenis de a ratos, el argentino se adueñó de un encuentro más que complicado en la previa, justo frente a un rival que se adaptó siempre bien a este suelo y que, por supuesto, contaba con la ventaja de quien se mueve mejor por sus características de juego. Sin embargo, esto poco le importó al Peque, que sentenció la historia en cuatro sets y selló su pase a la segunda instancia.

Allí, Schwartzman, vigésimo cuarto e la preclasificación, se medirá ante el alemán Dominik Koepfer, ciento treinta del mundo, quien venció en la primera vuelta al serbio Filip Krajinovic en cuatro parciales. Será el primer duelo entre el argentino y el teutón en el Tour de la ATP.