Federer se metió entre los mejores ocho de Halle tras vencer al francés en tres apretados sets.

En la previa del encuentro, el duelo entre Roger Federer y Jo-Wilfred Tsonga era uno de los condimentos más trascendentes de Halle, en Alemania. Y esa expectativa se plasmó en la cancha, donde el suizo se impuso por 7-6 (5), 4-6 y 7-5, en dos horas y dieciséis minutos, para avanzar a los cuartos de final y estar un paso más cerca de la final que defiende de la temporada pasada.

En un partidazo, Federer sobrevivió a un Tsonga que jugó totalmente suelto, como casi siempre lo hace, pero con una convicción demoledora, lo que hizo que el suizo tenga que trabajar más de la cuenta para poder doblegarlo, en un día donde además, el nivel propio, no fue el mejor y se lo vio cometer errores que no está acostumbrado a realizar.

Lo importante para Federer es que pudo resolver la historia a su favor y pudo acceder a los cuartos de final, donde este viernes se medirá ante el español Roberto Bautista Agut por un lugar en las semifinales y, así, estar un paso más cerca de la final que debe defender de la temporada pasada, donde cayó en aquel duelo definitivo ante el joven croata Borna Coric.