El tío y ex coach del Matador salió al cruce de los micrófonos y opinó que su sobrino es una persona que sufre diferentes lesiones crónicas y que juega al tenis. Además habló del actual coach del español y del tenis hoy en día en el circuito, dominado por los mayores.

Rafael Nadal siempre es un ítem en la lista de análisis que puede abrir muchas conjeturas una vez pasada esa etapa. Y esta vez el que opinó sobre el jugador español fue su tío y ex entrenador, Toni Nadal, quien aseguró que Rafa es una persona lesionada que juega al tenis y no un tenista que convive con lesiones.

El Tío Toni expresó en una entrevista exclusiva con el medio Cinco Días: “Rafael quiere seguir jugando, a pesar de sus problemas físicos. Eso es lo que va a seguir siendo, determinante. Hasta cuándo, quién sabe. Quizás dos o tres años más. Yo lo que digo es que Rafael no es un jugador de tenis, sino una persona lesionada que juega al tenis, y eso es muy difícil”.

Nadal sufre una tendinitis crónica en sus rodillas que le impide jugar con normalidad el circuito completo todos los años calendario y que le permite disputar ciertas giras sin problemas graves, como la parte europea de polvo de ladrillo o mismo los certámenes de césped, en Wimbledon sobre todo, por tener un impacto menor en sus rodillas que en el cemento, al ser superficies más blandas. Sin ir más lejos, el español jugó sus últimos tres certámenes en canchas duras en los Grand Slams de Estados Unidos en el 2018, en Australia este año y en Indian Wells hace poco más de veinte días, y en dos de los tres se vio obligado a retirarse en semifinales por no poder competir al máximo de sus posibilidades por los dolores que se lo impedían. A través de este análisis es que Toni Nadal hace el análisis sobre el estado de su sobrino.

El tío Toni, además, opinó sobre Carlos Moyá, el actual entrenador del ex número uno del mundo y al respecto dijo: “Lo veo bien. Lo más importante es que se aprecian y respetan mutuamente, algo muy necesario”. Con Moyá como entrenador, el español consiguió el año pasado su undécima corona en Roland Garros, en Montecarlo y en Barcelona, un verdadero animal del polvo de ladrillo, además de volver a ser número uno del mundo tras algún tiempo de reinado de Roger Federer en el circuito.

Por último, Toni reconoció cierto déficit en el tenis del más alto nivel hoy en día. Su análisis es que a los jugadores jóvenes les falta hambre para ser los mejores del mundo y que no depositan su mayor obsesión y concentración en conseguirlo, algo que a jugadores como Federer, Nadal o el propio Novak Djokovic, jamás les sucedería. “Hoy todos tenemos menos obligaciones que derechos, y el pasarlo bien tiene sus consecuencias, y es que cada vez queremos las cosas más fáciles y en menos tiempo. Por eso cuesta perseverar y avanzar. Los jóvenes del tenis son buenos, pero en general tienen menos compromiso. Yo he visto jugar a varios y luchar poco, y he visto perder a Federer, a Rafa, a Djokovic, pero nunca sin dar lo máximo. Por eso, cuando nosotros llegamos al circuito los mejores tenían entre 21 y 23 años. Ahora los mejores tienen 29, 30, 32 o 37 años”, sentenció el ex coach del español.