Stefanos Tsitsipas viene transitando un año 2019 soñado. El griego abrió la temporada con un Abierto de Australia de ensueño, seguido por buenos resultados que lo llevaron a ser el campeón en Marsella hace una semana y unos días después lo catapultaron a la final de Dubai, que cedió ante Roger Federer. Sin embargo, la gran noticia para el joven de 20 años es que a partir de esta semana, tras los resultados cosechados se instaló por primera vez en su carrera profesional dentro de los mejores diez del mundo.
Tsitsipas, quien en el último año consiguió triunfos ante Novak Djokovic, Federer y Alexander Zverev, es, sin dudas, una de las promesas más importantes del tenis por estos tiempos. Prueba de ellos son los títulos obtenidos en Estocolmo y Marsella en menos de cuatro meses de distancia, su producción en el Masters 1000 de Canadá de la pasada temporada y las semifinales de Australia en este año.
El número diez que ubica en el escalafón mundial no es casualidad para el griego, quien tendrá por delante dos Masters 1000 en donde el año pasado no consiguió grandes resultados y que le permitirán poder sumar buenos puntos para seguir escalando en el ranking mundial. Además, luego, vendrá la temporada europea de polvo de ladrillo, donde el último año cosechó la final en Barcelona como hito máximo, y que será una superficie en donde su andar no solo no desentona, sino que también está programado para conseguir grandes resultados.
Tsitsipas pide pista. Entra, de a poco, en el salón de los grandes del tenis actual, y con solo 20 años, su techo parece no tener límite. De seguir así, pronto se lo verá dentro de los mejores cinco tenistas del mundo, codo a codo, con Rafael Nadal, Djokovic, Zverev, Federer y Juan Martín del Potro.
Parte de los mejores puntos de Tsitsipas, el día que consiguió asegurarse meterse en el Top Ten:
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