El noruego se impuso al italiano Berrettini en el polvo suizo y levantó por segundo año seguido el trofeo.

Casper Ruud es uno de los grandes especialistas del polvo de ladrillo. Y en esta temporada volvió a demostrarlo en el ATP 250 de Gstaad, en Suiza, donde era el máximo favorito y retuvo el título. El finalista de Roland Garros se impuso en la final al italiano Matteo Berrettini por 4-6, 7-6 (4) y 6-2 y así conquistó su tercer título en lo que va del año.

Ruud, quien la semana pasada cayó en Bastad ante el argentino Francisco Cerúndolo en tres apretados sets, volvió a demostrar que el polvo de ladrillo es su superficie predilecta. En un torneo casi impecable, el noruego se impuso a dos españoles complicados como Jaume Munar y Albert Ramos Viñolas en los duelos previos a la definición, en la que se deshizo de Berrettini en tres sets, tras más de dos oras y media de lucha y sudor.

De esta forma, el nórdico conquistó Gstaad por segundo año consecutivo y se llevó el tercer título de la temporada, tras las cosechas de Buenos Aires en febrero y de Niza en Mayo, antes de alcanzar la final de Roland Garros, su primera en un Grand Slam. Además, sumó el noveno título en su carrera como profesional en el Tour.