El español no pudo, una vez más, coronarse en las Finales de la ATP. Es su gran talón de aquiles, donde jamás consiguió el título.

Pasan los años, pasan las temporadas y Rafael Nadal continúa sin poder ser campeón en el Torneo de Maestros, hecho que preocupa al español, pero también es hasta increíble y difícil de poder comprender para los estad´pistas y los amantes del tenis.

Un año más finalizó en el mundo de la ATP y Rafa pasó por Londres sin poder alcanzar siquiera la final. Las semifinales logradas y haber tenido contra las cuerdas al futuro campeón Daniil Medvedev fueron las cuestiones más cercanas que tuvo el mallorquín de poder pelear este año por la corona, en un evento donde cosechó dos muy buenas victorias, y se llevó dos derrotas, justamente ante los dos finalistas.

Londres 2020 fue su decimosexto año consecutivo clasificado al Masters de fin de temporada, y en ninguno de ellos el español pudo, sea por lesión o por cuestiones tenísticas, dimirse la corona y por fin levantarla, en lo que, sin dudas, es una maldición dentro de su palmarés, tal como sucede con el Masters 1000 de París, donde apenas pudo alcanzar una sola final, a diferencia de Londres, que estuvo esa instancia en dos oportunidades.