El austriaco habló tras caer en su duelo de cuartos de final en Roland Garros ante el argentino y reconoció que no estaba feliz con el resultado, pero que lo ponía contento que Schwartzman haya sido su vencedor y quien esté en las semifinales.

A veces, la hidalguía de caballeros se nota en actitudes adentro de la cancha. A veces, afuera. Y Dominic Thiem parece respetarlas en todos los ámbitos, pero que en el court es un señor y ante los micrófonos demuestra que tiene un alma de jugador gigante, como pocos en su profesión, para reconocer cuestiones que otros, muchas veces, prefiriesen pasar por alto.

En este caso, tras el duelo ante Diego Schwartzman en los cuartos de final de Roland Garros este martes, el austriaco flamante campeón del Abierto de los Estados Unidos, reconoció su decepción por haber caído en el encuentro ante el argentino, pero se mostró feliz porque su amigo fue su vencedor y quien ocupa un lugar entre los mejores cuatro del evento parisino.

“Fue un partido muy duro y lindo de jugar. Durante cuatro sets el nivel que mostramos fue excelente y me quedó con el espectáculo que dimos y por cómo jugamos. Obviamente estoy decepcionado por haber perdido, pero Diego lo merece. Luchó mucho por estar en este lugar y alcanzar su primera semifinal de Grand Slam, así que me pone contento por él”, declaró, en consecuencia, el número tres del mundo, quien ahora cambiará el chip prontamente para el último tramo del año con un objetivo claro: el Masters de Londres de final de temporada, que el año pasado de le escapó en la definición ante el griego Stefanos Tsitsipas.