Novak Djokovic dejó atrás los fantasmas del Abierto de los Estados Unidos y ya se encuentra en Roma para disputar el Masters 1000 de esa ciudad, donde dio el primer paso en positivo ante el local Salvatore Caruso, a quien derrotó por 6-3 y 6-2 para así meterse en los octavos de final y ser uno de los mejores dieciséis del cuadro principal.
Finalista de la última edición, la cual perdió ante Rafael Nadal, Nole llegó al Viejo Continente con el fin de hacer borrón y cuenta nueva post desencuentros con el público fanático del tenis y con las autoridades de la ATP, además del infortunio del US Open y su eliminación por suspensión. Y en el primer encuentro de Roma ya dio buenos indicios de que eso es parte del pasado, ya que ante Caruso no tuvo casi falencias y la victoria en sets corridos lo depositó rápidamente entre los mejores dieciséis del cuadro principal.
Ahora el serbio buscará los cuartos de final ante su compatriota Filip Krajinovic, con quien solo se enfrentó una vez en el Tour, en un match donde la victoria quedó en manos de Krajinovic, hace exactamente diez años, en Belgrado.
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