En el día del debut de varios Tops, el alemán quedó eliminado en cuatro sets ante el checo Vesely. El teutón defendía tercera ronda en La Catedral.

Alexander Zverev está viviendo un 2019 lejos de los lugares soñados a los que estaba acostumbrado en los últimos dos años de competencia. El alemán lejos está de ser ese jugador peligroso para todo oponente que tenga enfrente y se encuentra vulnerable, más allá de cierta recuperación plasmada desde la previa de Roland Garros hasta la fecha. Y, sin ir más lejos, ayer se sumó un nuevo episodio para el teutón en este declive: cayó en su debut en Wimbledon ante el checo Jiry Vesely en cuatro sets y ya le dijo adiós al tercer Grand Slam de la temporada.

Con parciales de 4-6, 6-3, 6-2 y 7-5, Vesely se adueñó del escenario y se hizo amo y señor en una superficie que le sienta bien y dio una de las sorpresas del día en la apertura de Wimbledon y, así, hundió aún más al joven Zverev, quien parece no encontrar el rumbo y quien culminó la temporada siobre césped con tan solo dos victorias y tres derrotas, algo inusual para un Top 10 como él, ya que además, en todos los torneos fue beneficiado por el hecho de ser preclasificado. Además, perderá 90 unidades por no haber podido defender la tercera vuelta alcanzada el año pasado.

Por el lado de Vesely, la realidad del alemán poco importa y ya está pensando en lo que será el duelo de segunda ronda ante el uruguayo Pablo Cuevas, quien ganó un encuentro épico ante el boznio Damir Dzunhur en cinco parciales para acceder a esta instancia.

En cuanto a duelos personales, Vesely y Cuevas se enfrentaron en tan solo una ocasión en sus historias como profesionales y la victoria quedó en manos del sudamericano: fue en el año 2015 y en San Pablo, torneo que, a posteriori, quedó en las manos de Cuevas.