El griego, uno de los favoritos al evento, derrotó en cuatro sets al boliviano y ya se encuentra entre los treinta y dos mejores de París.

El título en Estoril, la final en Madrid y las semifinales en Roma, sumado a la gran victoria en semifinales de la capital española ante Rafael Nadal, le dieron a Stefanos Tsitsipas el papel protagónico que tanto se deseaba del joven griego para este Roland Garros. Y este miércoles, el tenista de veinte años no defraudó a las expectativas y derrotó con contundencia y con un gran tenis de a ratos al boliviano Hugo Dellien por 4-6, 6-0, 6-3 y 7-5, en dos horas y cuarenta y nueva minutos de juego para meterse en la tercera ronda.

Tsitsipas, quien venía de doblegar al alemán Maximilian Marterer en tres sets en el debut, sucumbió en el primer parcial ante el sudamericano, quien tuvo un gran tenis durante toda esa primera manga pero desde que tuvo que ser atendido al principio del segundo parcial, pareció haberse deslucido en su andar y tuvo que mediar ante la gran performance demostrada por el griego, quien tras el triunfo se coronó aún más como candidato a quedarse con el certamen en la rama masculina.

En la próxima ronda, Tsitsipas tendrá que verse las caras frente al serbio Filip Krajinovic, quien hoy ganó ante el español Roberto Carballes Baena uno de los partidos maratónicos de la jornada y, sin dudas, el mejor de todos en cuanto a emoción y suspenso, para estar habilitado a disputarse un lugar en octavos de final ante el griego Top Ten. Será el primer duelo entre ambos jugadores en sus carreras como profesionales.