Los tenistas chilenos disputaron los octavos de final de Barcelona con distintas suertes. Jarry se metió entre los mejores ocho y Garín no pudo con Carballes Baena y se fue del Conde de Godó.

Nicolás Jarry y Christian Garín estaban viviendo una semana tremenda de tenis en España en el certamen catalán. Sin embargo, las ilusiones de ver avanzar a los dos trasandinos en el evento se frustraron esta tarde a medias. Mientras Jarry accedió a los cuartos de final tras vencer por 2-6, 6-4 y 7-6 (2) al búlgaro Grigor Dimitrov, Garín no pudo con el local Roberto Carballes Baena y cayó derrotado por 6-4 y 7-6 (2).

Jarry, quien ingresó al certamen como Lucky Loser y hace apenas dos días dio la sorpresa del torneo hasta el momento derrotando al alemán Alxander Zverev, tres del mundo y segundo cabeza de serie de la competencia, este jueves dio un nuevo paso en su carrera hacia una de las mejores performances de su carrera y se metió en los cuartos de final, luego de vencer en tres apretados sets y dos horas y dos minutos de juego al dúctil búlgaro Dimitrov. El trasandino, en la próxima instancia, se medirá ante el ruso Daniil Medvedev, quien viene de alcanzar las semifinales en el Masters 1000 de Montecarlo.

Garín, por su parte, frenó su racha ganadora de siete triunfos en fila ante el local Carballes Baena, quien también,. al igual que Jarry, ingresó al cuadro principal como perdedor afortunado. El español venció al chileno en do sets y una hora y cincuenta y cinco minutos de encuentro y en la próxima instancia se enfrentará al japonés Kei Nishikori con el fin de encontrar un lugar en las semifinales del Conde de Godó.