En la noche de ayer se dio un nuevo mano a mano entre Boca y River, en esta oportunidad por la Copa Argentina. Tras igualar en cero durante los 90 minutos, el encuentro fue a la definición por penales y finalmente fue el Xeneize el que se quedó con el pase a la siguiente ronda.
Pero es cierto que en los últimos años, River representaba un “problema” a Boca cada vez que debían enfrentarse, sobre todo en los encuentros de eliminación directa. Pero desde la llegada de Riquelme a la dirigencia, la historia parece haber cambiado.
El Boca de Riquelme y Russo cortó la racha de las victorias del Millonario en encuentros mano a mano, sobre todo teniendo en cuenta que River venía de eliminarlo en las últimas cinco definiciones de eliminación directa de manera consecutiva.
En el último torneo local se enfrentaron y tras un empate en uno, Boca consiguió el pase a la semifinales dejando eliminado a River. Tras este encuentro, se volvieron a ver las caras ayer por la noche y la definición fue nuevamente desde el punto de penal y ganó el Xeneize.
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