En River conviven dos líneas de tiempo: una es protocolar, políticamente correcta y prudente, en la que todo interlocutor evita pronunciar el nombre de Martín Demichelis como sucesor de Marcelo Gallardo.
No obstante, existe otra realidad. La objetiva. Esa en la que el actual entrenador del Bayern II de la Regionalliga ya es el sucesor del Muñeco: así lo sabe la dirigencia y el plantel, que lo charla en la intimidad. Una dimensión en la que nuevo deté ya transita oficialmente su desembarco.
Las dos líneas de tiempo tendrán un punto de cruce en el almanaque: el 14 de noviembre, día en que el apellido Demichelis sería oficializado como entrenador de River. No obstante, desde Bavaria, Martín ya está informalmente en funciones: del mismo modo que mantuvo charlas con Enzo Francescoli y con los principales dirigentes del club, también ha tenido contactos con Gallardo.
La idea de Demichelis es aprovechar esos 25 días para terminar de inmiscuirse en los detalles más finos, para evaluar los informes que le dejará el actual CEO del fútbol -que tendrán, por historia, un enorme peso específico- y en base a ellos pero también a su propia percepción, empezar a imaginar el River 2023.
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