Benedetto, de emblema de Boca a quedar libre en Newell’s
El delantero de 35 años fue informado por Lucas Bernardi que no sería tenido en cuenta y llegó a un acuerdo para rescindir su vínculo. Sin goles y con lesiones, cerró un ciclo para el olvido de apenas cuatro meses.
Darío Benedetto volvió a quedar en el centro de la escena, pero no por sus goles. Tras ser marginado por Lucas Bernardi, técnico interino de Newell’s, el delantero rescindió su contrato con el club rosarino y quedó en libertad de acción. Su paso por la Lepra duró apenas nueve partidos, no logró anotar y estuvo marcado por lesiones, frustraciones y un penal fallado ante Belgrano que terminó siendo la imagen de su caída futbolística.
El final se precipitó luego de que Bernardi, quien asumió tras el despido de Cristian “Ogro” Fabbiani, le comunicara al Pipa que no sería tenido en cuenta para lo que resta del torneo. Horas después, ambas partes acordaron la rescisión. “El Club Atlético Newell’s Old Boys comunica que, de común acuerdo entre las partes, se dio por finalizado el vínculo contractual con el futbolista Darío Benedetto. Le deseamos éxitos en su nueva etapa”, expresó la institución en un comunicado oficial.
Benedetto había llegado a Rosario en junio con la intención de relanzar su carrera tras un cierre conflictivo en Boca, pero nunca logró recuperar su nivel. Disputó nueve encuentros, todos sin goles, y sufrió diversas molestias musculares que lo mantuvieron marginado por varias semanas. Su última gran oportunidad la tuvo en la derrota 3-0 ante Belgrano, cuando desperdició un penal y estiró una sequía que ya alcanza un año y siete meses sin convertir.
El delantero no marca desde febrero de 2024, cuando anotó frente a Tigre por la Copa de la Liga vistiendo la camiseta de Boca. Desde entonces, acumuló 36 partidos entre Boca, Querétaro, Olimpia y Newell’s sin poder festejar. Muy lejos quedó aquel artillero letal que marcó 71 goles en 172 encuentros con el Xeneize y que llegó a vestir la camiseta de la Selección Argentina.
En su última etapa en Boca, el Pipa protagonizó más conflictos que goles: discusiones internas, su enfrentamiento con Diego Martínez —recordado por la frase “noches alegres, mañanas tristes”— y una salida anticipada en medio de silbidos marcaron el fin de su vínculo con el club.
Ahora, sin equipo y con 35 años, Benedetto atraviesa el tramo final de su carrera buscando una nueva oportunidad que le permita reencontrarse con el gol y cerrar su historia dentro de una cancha con otra imagen. La incógnita, una vez más, es si aún está a tiempo.
