“Tu fama será eterna”… Se lo pudo haber dicho Dios, como también pudo haberle dicho aquella tarde de México en 1986 cuando controló el balón detrás de la mitad de la cancha: “Encará, Diego, que no te van a poder parar los ingleses”.
Hoy el destino de gloria de Diego Armando Maradona sumó un capítulo más: el 10 fue incluido en el Salón de la Fama del fútbol italiano en una ceremonia llevada a cabo en Florencia.
Como si a su leyenda todavía le faltara algo, como si todavía le quedaran hitos por conquistar ya desde fuera de una cancha. ¿Merecido? Es poco. Lo hecho por Diego con el Nápoli ya es eterno.
Antes, su recorrido de homenajes pasó por Nápoles donde el pueblo napolitano le rindió su tributo como cada vez que pisa ese suelo. El 10 estuvo en el estreno de una obra de teatro inspirada en su trayectoria.
Un reconocimiento más.
Simplemente Maradona.
Disfruta de acceso ilimitado entre más de 100 juegos de deporte, estrategia, acción y más.
Suscribirme