Parece que si no sufre no goza. Algo de eso hay en el ADN de Boedo. Anoche San Lorenzo consiguió un triunfo y una clasificación agónica a los octavos de final de la Copa Libertadores.
Sí, otra vez ante un equipo brasileño como en aquel 2014 que terminó levantando la primera Copa de su historia.
Anoche, en desventaja desde los 13 minutos ante el bravo Flamengo, el equipo de Aguirre nunca bajó los brazos y encontró primero la cabeza de Angeleri (otra vez como ante Huracán) y después ya en tiempo de descuento y tras varios rebotes el pie milagroso de Belluschi para el 2-1 y el delirio en Bajo Flores.
San Lorenzo está en octavos y eliminó al Flamengo
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