Dicen los que saben que sólo las caídas de los grandes hacen ruido por todos lados. Y así se sintió la derrota del Barcelona y del mágico Messi, que cierran la temporada con mucho de sinsabor, pensando en las semis del escándalo y en esta derrota de hoy.
Con Ezequiel Garay como titular en la zaga, el Valencia se hizo fuerte y pudo lograr cortar una sequía de 11 años sin ganar el certamen.
En doce minutos el equipo Che logró imporner una diferencia muy difícil de remontar para este golpeado conjunto catalán: a los 21 Kevin Gameiro puso el 1 a 0 y a los 33 Rodrigo Moreno estiró esa ventaja.
A los 73 fue Lionel Messi, una vez más, el que encendió la chispa de la ilusión… Pero quedó sólo en eso. Fue Valencia el tocado para gritar campeón. Y así lo festejó.
A los Messistas les queda la ilusión de la Copa América para cerrar la temporada. Se verá…
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