El Barcelona ha dado esta tarde un nuevo paso en su camino hacia la obtención de la Liga, superando como local por 3-1 al Rayo Vallecano.
Alejándose de las suposiciones que decían lo contrario, la rotación que dispuso Valverde de cara al Miércoles de Champions fue mínima, manteniendo 8 de los 11 de gala habituales, incluido Messi, de quien se decía estaba entre algodones por molestias en su aductor derecho.
Solo descansaron Lenglet (suspendido, se le dieron minutos a Umtiti, retornando de su lesión), Rakitic (Vidal titular, en un medio centro alternado con Arthur y Busquets) y Dembelé (fue allí Coutinho, que sigue sin levantar, y en el ST ingresó de arranque por Arthur).
La clave de esta victoria ha sido el ST del equipo culé, luego de un PT en el que si bien dominó el trámite, no pudo imponerse totalmente y hasta estuvo en desventaja (0-1 por un gran gol de De Tomás, el mejor de los de Vallecas) hasta el empate de Piqué a los 40’tras un centro-pase de Messi
El revulsivo, sorpresivo pero efectivo, ha sido el cambio de esquema que Valverde dispuso para el complemento, proponiendo, tal como hizo contra Sevilla hace 15 días, un dibujo cercano al 4-2-4, con Vidal y Busquets (enorme partido de ambos) de doble pivote en campo rival y 4 jugadores desplegados en ataque (Dembelé – entrado de inicio por Arthur-y Coutinho por las bandas con Messi y Suarez alternándose de delantero centro). Claramente ha sido de gran ayuda el penal sobre Semedo que a los 4 minutos solo el árbitro ha visto y Messi tradujo en gol.
A partir de allí, el Barca puso en caja el trámite, administró piernas y energías pensando en Lyon y se recostó en los siete puntos que conserva sobre al Aleti, reconfirmados con solvencia. Quedan en el haber algunas imprecisiones que impidieron aumentar el marcador (no estuvo fino Suárez, y Messi solo fue terrenal) y otras tantas desatenciones defensivas, en pelota parada y especialmente, por la baja forma aún de Umtiti para relevar a Alba a sus espaldas ,y el cada vez más notorio bajo nivel de Coutinho, que ha dejado pasar otra oportunidad para recuperarse (para colmo, en la primera que tuvo, Rakitic bordó una asistencia genial para 3-1 de Suárez)
Resolvió Barcelona con solvencia un partido que empezó de lado, celebra terminar la jornada sin lesiones ni malas nuevas y desde mañana ya estará el chip en modo Champions, en un Miércoles que se espera a casa llena, en otro paso hacia el sueño del triplete.
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