El equipo de Lionel Messi perdió por 2 a 0 con Brasil. Los goles del local los hicieron Jesús y Firmino. Para la Selección queda el partido por el tercer puesto.

Había mucha duda sobre la selección para este partido pero, vaya paradoja, fue el partido más equilibrado del equipo de Scaloni. El Brasil local y candidato salió decidido a marcar la cancha. A hacer sentir la localía. Y así empezó a imponer su ritmo y Argentina hasta que lo descifró, lo padeció. Pero una vez que encontró cómo cortar los circuitos se lo vio mucho más seguro.

A los 19, en la única jugada clara para la verdeamarela, Dani Alves frotó la lámpara o sacó de su galera (elija la que más le guste pero que es mago, eso seguro) la jugada que marcaría la diferencia. Abrió para Firmino que le sirvió el gol a Jesús: 1-0. Pero Brasil fue eso y no mucho más.

¿Argentina? ¿Messi? El conjunto naciónal luego de eso, más allá del golpe, se plantó mejor y mostró autoridad, o algo parecido. Messi empezó a agarrar el timón y llevar a la Argentina a buscar el resultado. Tuvo alguna jugada de ese Messi que esperan todos. Y de pelota parada, luego, generó la oportunidad del empate: cabeceó muy bien el Kun pero el travesaño dijo no. La fortuna no acompañó.

Al segundo tiempo el equipo de Messi salió a por todo, se plantó bien y buscó. Buscó con Messi, buscó con Agüero, buscó con Martínez.

Messi tuvo un tiró libre que se prestó para la emoción pero Allison lo descolgó de manera perfecta.

De Brasil (en el primer y segundo tiempo) impecable partido de Dani Alves, de esos cracks de la historia, lateral y brasileño. Hay que repetirlo hasta el cansancio.

El segundo gol del Pentacampeón llegó tras una corrida de Jesús que le terminó sirviendo el gol a Firmino, en devolución de gentilezas.

Ganó Brasil porque fue más efectivo en las áreas. Quedarán para el recuerdo el Cabezazo de Agüero al travesaño y una definición de Messi al palo, en el segundo tiempo. Argentina jugó, tal vez, el partido más prolijo de la Copa. Pero así es el fútbol, no tiene lógica….

Dos jugadas generaton polémica una falta sobre Agüero, de la que no se vio en ningún momento la repetición y una obstrucción sobre Otamendi, tras un córner. ¿Del VAR? Nada.

Brasil ganó y está en la final. Para Argentina queda el partido por el tercer puesto.

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